Por: Penélope Mujica
La primavera de J.W.Anderson es una en la que queremos vivir, y hasta morir… por siempre revoloteando en sus creaciones que no se apegan a ninguna ley. Llamativas, vanguardistas y propositivas, una vez más las prendas que desfilan en la pasarela del príncipe de la moda británica nos dejan soñando con colores y siluetas que no responden ante ningún esquema, excepto el del mismo diseñador.
Inspirada en la novela “El principito”, las ropas que fueron mostradas señalan esa intrínseca relación de Jonathan con su propio niño interno, que vez tras vez desafía y cuestiona el mundo tal cual lo conocemos.