27 de febrero, 2019
Por: Adán Ascencio
1989, Madrid, España. La conocida trágica muerte de una supuesta pareja de amantes tras ser arrollados por un coche sin luces, siendo inútiles sus intentos por esquivarlo, donde se presume haber sido un golpe certero el que acabó con la vida de estas dos personas.
La victimaria confesó haberlos seguido loca por los celos resistiéndose a llorar. La mujer afirmó no haber querido ni mirar, pero aun así, firme sobre su decisión, nunca dio marcha atrás, aprovechando la calle desierta, “la noche ideal” afirmó la mujer.
-
“¡No me arrepiento! Volvería a hacerlo”, sostenía mientras una y otra vez preguntaba a sí misma: “¿cómo pudiste hacerme esto a mí?, yo que te hubiese querido hasta el fin, sé que te arrepentirás”.
Pasado un tiempo, empezando la temporada y con el dos mil en curso; tras diez años, algunos meses y hasta un día más, habiendo heredado la fortuna de su difunto marido y habiendo también cumplido la condena su asesinato doloso (doble asesinato, su cónyuge y su acompañante).
Frente a la cárcel, parada y empuñando un Louis Vuitton: “…todo se acabó. ¡Soy libre!, ¡SOY LIBRE AL FIN!”, decía orgullosa.
Fiel a su idea no se arrepintió. Lo sostenía mientras una y otra vez se preguntaba:
¿Qué sería de mí sin ti? ¿Cuál sería mi porvenir?… Eres mi dios.
Extrapolaciones y dos preguntas (1989-2000) es el nuevo disco de Fangoria, en el que se retoma el tema “¿Cómo pudiste hacerme esto a mí?”, de Alaska y Dinarama. Para pensar en una posible extrapolación del drama expuesto en aquella canción con una segunda pregunta: “¿qué sería de mi sin ti?”.