La colección presenta prendas de punto puntiagudas, prendas con un estampado influenciado por la flor de loto, un símbolo de pureza de la cultura budista. También presenta pantalones de mezclilla acampanados de talle con la técnica de serigrafia directa. Al principio de la pasarela la música era tranquila, pero las luces cambiaron y se escucha una banda sonora de techno. Creando una mezcla entre el YK2 y el raver chic.