VENUS AS A BOY: entrevista a Matt Kulisch
Fotografía: Matthew Kulisch
Texto: Prett Rentería
Los retratos normalmente son aburridos, monótonos y, algunas veces, en escala de grises. Qué tan gris se puede ser al hacerlo parece el objetivo de los fotógrafos profesionales que tiran disparos a sueldo para obtener un buen encuadre, iluminación y definición del rostro del retratado. Es difícil obtener imágenes que ofrezcan algo más al espectador que un simple documento de identificación, o cuando se involucra un poco más de creatividad, una foto plana con excelente luz. Sin embargo, parece ser que en ámbitos distintos –Internet, Tumblr, Stumble, etc– podemos toparnos con gente con gran pericia y buen ojo, eso que algunos llaman “genio”, para la fotografía. Qué tan “bueno” puede ser alguien en lo que hace no siempre se puede deducir al observar la técnica que utiliza, sino el proceso en el que se involucra, y tal es el caso de Matthew Kulisch, fotógrafo emergente que vive en Los Ángeles, California.
Después de observar algunas de sus series, parte de su portafolio, y demás fotos que hallamos en Internet, fácilmente nos dimos cuenta de que el erotismo masculino es una constante en su trabajo. Los retratos de la intimidad, el ocio, y la soledad de bellos chicos nos hacen pensar en la figura del eterno efebo, en contraste con la crudeza temática involucrada en la totalidad de la fotografía. El placer que se experimenta en estos contrastes nos emocionó a tal grado que decidimos hacer una pequeña entrevista a Kulisch para que nos hablara un poco de su trabajo y del proceso creativo
involucrado.
P: Matt, hemos visto parte de lo que haces en algunos blogs y en tu página web
www.mkulischphoto.com
y nos encanta, estamos algo curiosos por saber más. Te haremos preguntas sencillas pero importantes para nosotros, por favor siéntete libre de responder lo que se te venga en mente.
P: ¿Cuándo empezaste a hacer fotografía?
M: Empecé a hacer fotografía de forma seria hace unos nueve años, durante mi último año en la universidad. Tenía un talentoso profesor, Rosi, un artista de mixed-media, quien me motivó a fotografiar piezas de arte performático -incluyendo el trabajo del artista interdisciplinario cubano/americano Ernesto Pujol; ambos me empujaron por el camino de la fotografía conceptual y temática. Más adelante, estudié un posgrado en surrealismo, lo que me ayudó a sustentar teóricamente algunos de mis métodos. Pero en realidad se trata de fotografiar chicos lindos que habitan una cierta anti-masculinidad: simple, historias sobre sus cuerpos en el espacio. Me parece chistoso cómo el surrealismo y el arte performático me trajeron hasta aquí.
P: ¿Crees en el talento? Es decir, además de tener conocimientos técnicos sobre fotografía, ¿consideras que lograr una buena imagen va más allá de sólo saber cómo usar una cámara correctamente?
M: Creo que es aquí donde mis influencias artísticas se revelan. Sí, hay algo más que poseer sólo conocimientos técnicos. Sientes el espacio, la luz, y a la persona con la
que estás trabajando. No hago mucha dirección; en vez de eso, me concentro en que el modelo entienda bien el concepto. Trato de no intervenir demasiado en las sesiones.
P: Nos dimos cuenta de que prefieres retratos límpidos, con luz natural. ¿Hay alguna razón o inspiración específica en lo que eliges para hacer tus series?
M: Me gusta la contradicción entre la nitidez y la suavidad, pero nunca había escuchado una descripción de mi trabajo como algo “limpio”. Me gusta, ¡se lo diré a mi mamá! El tipo de fotografía al que estaba acostumbrado a ver hace algunos años era de hombres guapos en un estudio, podías ver la definición de cada músculo, pero no había mucha variación o sorpresa en ello. Lograr esa limpidez de la que hablas en
conjunto con algo de asombro es justo lo que quería hacer en mis retratos.
P: Cuerpos gráciles y simplicidad en cada foto, ¿es algo espontáneo?, ¿cómo lo haces?
M: Me alegra que parezca espontáneo; y durante la sesión, lo es. Pero soy muy
quisquilloso en el casting y en el proceso de postproducción. Hay mucha planeación
para que todas las personas involucradas se sientan seguras y cómodas cuando
hacemos el shooting.
P: Estos retratos de la intimidad masculina nos hacen sentir nostálgicos, ¿buscas lograr cierta experiencia estética en el espectador relacionada con esto?
M: Oh, sí, ¡definitivamente! Me han dicho que hay algo de voyeurismo en mi trabajo, tal vez la gente lo ve así porque a menudo recurro a la desnudez y algunos no pueden ver
cuerpos sin pensar en algo provocativo. Pero no estoy de acuerdo con ellos. Alguna vez has visto a una persona en un cuarto contiguo -o tal vez una pareja- y sientes como algo que te recuerda a casa. Eso es lo que quiero que la gente sienta cuando vea mi trabajo. Que le recuerde a casa. El que a ustedes les cause nostalgia son buenas noticias para mí.
P: ¿Piensas en música o cualquier otra cosa cuando haces las fotos? ¿Qué tipo de música?, ¿alguna banda en particular?
M: Algunas veces uso música durante las sesiones. Si el modelo no escoge, yo pongo algo que me guste. Lo que sea de Clint Mansell, James Newton Howard, John Murphy o Alexandre Desplat.
P: ¿Cuál es tu postura sobre el arte contemporáneo?
M: Yo creo que ¿seguir haciéndolo?, ¿apoyándolo? Gente más inteligente que yo debe de tener una mejor opinión sobre esto. Nunca estudié arte contemporáneo de manera ordenada.
P: ¿Consideras que lo que haces es arte? ¿Por qué?
M: Ésa es una pregunta difícil. Hay muchos tipos de personalidades involucradas en quién llega a decidir esto en últimainstancia.
Nuevamente, gente más inteligente que yo. Uno de mis primeros fotógrafos americanos favoritos, F. Holland Day, argumentó que la fotografía debe acercarse al mismo nivel de artificio que la pintura. Él creía que sus contemporáneos estaban obsesionados con el aspecto técnico de la cámara. Yo pienso que la historia y el concepto deben ser tomados en cuenta antes que la técnica – ellos crean la atmósfera en la que el modelo se desenvuelve- y la mayor parte de mi trabajo que considero ingenioso tiene mucho de eso.
P: Por último, ¿tienes referencias cinematográficas específicas?
M: Desde la fotografía, en primer lugar, Herbert List, Hadar Pitchon, David Armstrong, Ryan McGinley, Gerardo Vizmanos, Jessica Yatrofsky, Will McBride. Menos fotografía de moda y más cuerpos incrustados en el espacio vivo. Me han dicho que mis fotos son como stills de cine. Hay influencia de películas de finales de los 80’s en mi trabajo, como Stand by me -1986- de Reiner, o My own private Idaho -1991- de Gus Van Sant.
Pero donde mis influencias fotográficas, como McGinley, me representan los momentos más salvajes y estilizados de estas películas, mi propio trabajo parece ser parte de sus momentos más tranquilos. También me gusta el nuevo cine queer, como la adaptación de A single man, de Isherwood, dirigida por Tom Ford en 2009. Próximamente me gustaría retratar a Nicholas Hoult. Películas como Heartbeats -2010- de Xavier Dolan, o Closet Monster -2015- de Dunn. Como mencioné anteriormente, me inspiran las escenas más tranquilas de las películas. Aspiro a capturar toda la belleza de la cinta.
C.R.A.Z.Y. -2005- , de Jean-Marc Vallée: la escena de transición, con Marc-André Grondin, cantando junto con Bowie es el tipo de poesía visual con la que sueño.
M: Les agradezco la oportunidad de ser entrevistado. Estoy familiarizado con el trabajo de Tony, el editor-en- jefe de la revista, y realmente me encanta su estética, el concepto de Babes! y lo que Y- NOT está haciendo. ¡Muchas gracias!