Por Daniela Ponce

Si te dieran a escoger entre salud y belleza, ¿qué elegirías? Seamos realistas, por más que defendamos que el interior es lo que importa, la belleza física abre muchas puertas: te aseguro que nadie enviará a tu mesa una bebida gratis por tu gran intelecto, ni pasarás por aduana sólo con una sonrisa debido a que eres bien buena gente…

Si la belleza fuera tan fácil de adquirir cómo una gripe moquienta, si te dieran la opción de infectarte de la perfección física, si ser bello fuera simplemente el efecto secundario de un virus, ¿estarías dispuesto a contagiarte? Te harían pruebas para analizar la trayectoria de la “enfermedad”, quizás algunas veces sentirías nauseas y tendrías que cargar pastillas para controlar otros síntomas, nada demasiado grave: fiebre algunas noches, dolor de cabeza otras, quizás un poco de temblor en tus manos; y a cambio de eso, podrías recibir aprobación en forma de like, miles y miles, tendrías cientos de marcas queriendo colaborar contigo ¿quieres el nuevo labial de Fenty? ¿Un nuevo accesorio de Foreo? ¿Una bolsa de Gucci? Bastaría solo con insinuarlo en tu perfil… y voilá, en unos días los tendrías en la entrada de tu casa.

Hasta que de pronto, las pastillas dejan de funcionar: Los dolores de cabeza se vuelven más intensos, la fiebre no te deja mantenerte de pie y los temblores son insoportables. Sientes nauseas, sientes miedo, sientes que todo se acaba… sostienes un espejo y no reconoces a la persona que ves. Tu cuerpo ha sido tan alterado que ni siquiera consideras tu pasado, tu niñez, tus recuerdos… como parte de la persona que eres ahora.

Resulta que tu “enfermedad” ha llegado a una etapa terminal… un laboratorio farmacéutico tiene un antídoto… pero no te lo dará. No informará de su existencia porque no es un buen negocio, es mucho más rentable seguir vendiendo pastillas que controlen los síntomas mientras la enfermedad avanza… a menos… a menos que decidas arriesgarte por encontrarlo. Has oído de este antídoto y no quieres morir aún, ahora no quieres sólo belleza, sino también trascendencia…y vida. ¿Qué estás dispuesto a sacrificar para obtenerla?

Decisiones, obsesiones y grandes ilustraciones. “Beauty” es una novela gráfica creada por Jeremy Haun y Jason Hurley; aborda todo lo anterior a través de una crítica exquisita a la sociedad moderna y el culto a la belleza canónica…

Si te dieran a escoger entre salud y belleza, ¿qué elegirías?